Preguntas Frecuentes

Los tubos de vacío absorben la radiación solar y la convierte en energía calorífica. De esta manera, al calentar el agua que se encuentra en el interior de los tubos, la temperatura se eleva, el agua caliente cambia su densidad y asciende al tanque (efecto termosifónico por gravedad). Mientras tanto, el agua fría dentro del tanque desciende a los tubos nuevamente. En toda esta fase se crea un ciclo natural de calentamiento.

Sí. Se debe realizar una conexión desde la salida del termotanque solar a la entrada de agua fría de su sistema instalado (calefón o termotanque convencional). De esta forma el agua que ingresa a su sistema tiene una temperatura más elevada reduciendo de forma significativa el consumo de gas/electricidad.

Los termotanques solares pueden ser utilizados en temperaturas tan bajas como -25ºC (según el modelo/serie).

Los tubos de vidrio son altamente resistentes. Están certificados mediante norma internacional para resistir granizo de hasta 2.5cm de diámetro y temporales con vientos en el entorno de los 120 Km/h.

Contamos con un amplio stock de repuestos. En caso de roturas, se recomienda cambiarlo(s) en el menor plazo posible para asegurar un óptimo rendimiento.

El ánodo de magnesio, o comúnmente llamado ánodo de sacrificio, evita la deposición de sarro en el equipo y prolonga la vida útil del termotanque. En zonas donde el agua posee alta dureza, es recomendable hacer un chequeo cada 6 meses del ánodo para cambiarlo antes de su descomposición total.

Aunque la cantidad y densidad de nubes disminuye el rendimiento de los termotanques solares, en un día cubierto podrá igualmente obtener agua caliente. En el caso de varios días sin sol o con lluvias, se puede encender la resistencia eléctrica o el sistema convencional, que actúa como fuente de apoyo para elevar la temperatura del agua al nivel requerido.

Bajo circunstancias normales no es necesario ningún tipo de mantenimiento. Se recomienda realizar una limpieza a los tubos antes de la llegada del invierno. En zonas de aguas duras se recomienda ablandar el agua y revisar el equipo cada 6 meses, con el fin de disolver las posibles incrustaciones de sarro.

No existe un estándar, aunque en la mayoría de los casos Ud. Puede amortizar la inversión dentro del mismo año o a los pocos años de instalado. El tiempo de amortización y el cálculo de ahorro varían según el nivel de consumo, el valor por m3 de gas – empresa prestadora del servicio (si se emplea gas envasado o gas natural) y el valor del equipo.

El sistema solar se configura como un banco de varios colectores solares SOLARMAT conectados en paralelo. El sol calienta los colectores, y este calor es transferido a la piscina mediante la circulación de la bomba de filtrado. Se coloca un controlador digital solar que realiza la lógica y automatismo de encendido de la bomba sólo cuando es necesario, reduciendo su tiempo de funcionamiento y optimizando la transferencia de calor en todo momento.

El rango promedio en primavera y verano se encuentra entre los 25 y 32 grados.

SOLARMAT de SUNGREEN permite extender la temporada y la cantidad de horas por día de la piscina. Generalmente funciona desde sep/oct hasta mar/abr, dependiendo de la temporada.

Para climatizar la piscina durante los meses de frío, es necesario contar con un sistema de apoyo convencional (caldera a gas o eléctrica). En este caso, el sistema solar y el convencional funcionan como sistemas complementarios, reduciendo el consumo de gas/electricidad. Para una pileta cubierta, climatizada todo el año, el sistema solar aporta aproximadamente el 50% de la energía total necesaria anualmente. El restante 50% lo aporta la caldera, resultando por lo tanto en un ahorro del 50% para el cliente.

La cantidad de dispositivos se calcula de acuerdo a la ubicación geográfica de la piscina (nivel de radiación solar), nivel de temperatura que se desea alcanzar y condiciones particulares de cada piscina (exposición a vientos y humedad). En promedio se calcula entre el 50% y el 100% del área del espejo de la piscina. Este porcentaje depende de la ubicación geográfica de la instalación.

Ejemplo: Pileta en Buenos Aires

Medidas: 8 x 4 = 32 mts2

Área de cobertura = 70% = 22,4 m2

Superficie por colector = 1,08 m2

Cantidad de Colectores a instalar = 20 unidades

Su vida útil a la intemperie es de más de 15 años.

Resisten a la intemperie exposición continua a la radiación ultravioleta del sol y a temperaturas de – 20°C hasta + de 110°C.

Por ser flexible no es afectado por la congelación interna, se puede instalar sobre superficies irregulares y es transitable; se puede plegar o enrollar.

Cubriéndola durante las horas de no uso. Si la pileta se cubre, las pérdidas de temperatura se reducen de forma significativa. Hay varios tipos de cobertores, los de lona y los flotantes están entre los más comunes.

Sí. Al emplear este sistema, usted estará reduciendo de forma importante el consumo de su caldera de gas. El sistema solar será la fuente de climatización primaria desde octubre hasta marzo, mientras que la caldera de gas, actuará únicamente cuando la radiación solar esté muy baja y/o sea insuficiente.

La mayoría de las bombas son capaces de hacer trabajar un sistema de climatización solar de piscinas, sin embargo esto dependerá de los requerimientos particulares; principalmente la altura relativa entre la ubicación de la bomba y los colectores.

Los paneles transforman la luz solar en corriente continua. La misma pasa por las unidades de control (ver las distintas opciones) y es enviada a la bomba sumergible ubicada en el interior de la
perforación, debajo del nivel de agua del acuífero. Desde allí la bomba toma la energía eléctrica y la emplea para impulsar el agua desde las profundidades hasta el tanque de almacenamiento.

La bomba cuenta con la inteligencia necesaria y protección de funcionamiento en vacío integrada.

Se incluye boya de nivel, de modo de detener la bomba en cuanto el nivel de agua del tanque llegue a su nivel nominal de llenado y encenderla nuevamente en forma automática. Distintos accesorios pueden ser incorporados al sistema a fines de ampliar sus funcionalidades, como llave de encendido, posibilidad de alimentación eventual desde grupo electrógeno y una unidad inteligente con diagnóstico e indicación de potencia de funcionamiento en tiempo real.

Para cumplir con las necesidades acorde de cada tipo de instalación, es necesario seleccionar el modelo de bomba adecuado para cada necesidad. Dicha selección viene determinada por cuatro factores principales:

• El lugar geográfico de la instalación.
• La altura de elevación del agua, en metros.
• La distancia lineal de traslado del agua en metros.
• El caudal requerido en verano y el caudal requerido en invierno.

Nota: se recomienda incrementar en un 20% los requerimientos de caudal para el caso de zona sur y cordillerana del país a efectos de compensar bajos niveles de radiación solar.

No hay limitaciones. El sistema solar se adapta a la potencia de la bomba, bien la existente o bien la que se diseñe.

Sí, se puede hacer riego directo. El sistema de paneles solares se puede diseñar para que la bomba funcione a la potencia necesaria para mantener la presión deseada. Pero esa presión se podrá mantener un determinado tiempo al día, en función del diseño que se haga.

Para regar de noche hay tres opciones si queremos utilizar sólo energía solar ya que de alguna forma tenemos que acumular la energía producida de día. O bien se acumula la energía eléctrica en baterías, para poder usarla de noche o en días muy nublados (esto no suele ser muy rentable para este uso), o bien se acumula el agua en altura (se eleva el agua durante el día a un embalse a la altura suficiente para que nos de la presión natural para regar). Y como tercera opción, se podría utilizar de noche (o en días muy nublados), una energía externa de apoyo (grupo diesel o la Red), de forma puntual ya que el gasto sería mucho mayor.

Resulta destacable el tipo de motores eléctricos que impulsan a las bombas: son sumergibles y operan llenos de agua, como resultado de un especial diseño de su aislación eléctrica y sus cojinetes.

Esto asegura una refrigeración adecuada, y al mismo tiempo aumenta su confiabilidad.

Suele ser necesario reemplazar el rotor helicoidal de la bomba a partir del quinto año de uso, lo cual resulta muy sencillo y económico. Este período puede acortarse si el agua que se bombea contiene arena u otro tipo de sólidos en concentraciones superiores al 2% en volumen.

Para ser precisos, los sistemas de iluminación solar funcionan entre 8 y 10 horas. Este tipo de luminarias acumulan más energía en los meses del verano, pues los días son más largos y soleados. Generalmente, el controlador sirve como sensor de luz, al irse la luz solar se encienden las lámparas y al percibir nuevamente los rayos del sol se apagan otra vez. Además se puede programar el controlador para su uso conforme a la necesidad de cada contexto.

Las baterías de ciclo profundo, generalmente utilizadas en estos sistemas, son recargadas por medio de la luz solar que captan los paneles solares. Por ello no requieren de un cargador extra.

Las lámparas LED son las que se utilizan, de manera estándar, en los sistemas de iluminación fotovoltaica para exteriores. Las bombillas led son famosas por funcionar hasta 100 mil horas, por lo que también ahorran un gasto de mantenimiento.

No se necesita mantenimiento, a excepción de las limpiezas ocasionales en los paneles.

En lo absoluto, estos sistemas están diseñados para resistir lluvias, por ello son para exteriores. Los componentes de estos sistemas son a prueba de agua y no hay que preocuparse por ellos.